Descubre cómo preparar el mejor café para tu home office

Gastronomía | 24 diciembre, 2021

Con los consejos de Natalia Musacchio, dueña de la barra para eventos Café con Ruedas, podrás elegir el café más delicioso y prepararlo en casa de forma sencilla, económica y sustentable. Tu trabajo en casa no volverá a ser el mismo.

No hay algo que se compare con el olor de una buena taza de café en la mañana, ese primer sorbo calientito, señal inequívoca de que ha comenzado el día. Con la pandemia creció el trabajo en casa y, para muchos, éste sigue siendo una realidad. El café que solían tomar en la oficina o en alguna tienda especializada de camino al trabajo, ahora deben prepararlo en casa. La buena noticia es que hay métodos artesanales que son una forma fácil, económica y, sobre todo, deliciosa de preparar café sin necesidad de costosas cafeteras o productos caros. 

Si todavía estás en home office o simplemente ya no quieres destinar un presupuesto diario para tu café mañanero, aquí encontrarás algunos métodos con los que puedes prepararte un riquísimo café sin salir de casa, sin desembolsar un dineral y también sin contaminar.

Métodos

Los métodos más sencillos y rápidos para hacerte un café son la prensa francesa y el AeroPress. Ambos puedes encontrarlos en tiendas online, pero ¿cómo elegir el mejor? Natalia Musacchio, especialista en todo lo referente al café, tiene algunos tips que te ayudarán con esta importante decisión.

Las prensas francesas vienen en muchos colores, materiales y marcas. Puedes elegir la que más te guste, sólo es importante que el cuerpo principal sea de vidrio (no de plástico) y que los filtros puedan desenroscarse para lavarlos. Las versiones más económicas normalmente vienen pegadas de fábrica, por lo que a la larga se quedan muchos restos de café atrapados que pueden amargar tu taza, además de que puede salirles hongo sin que te des cuenta. También elige, de preferencia, la que tiene émbolo de acero inoxidable, ya que, con las altas temperaturas del agua, el plástico puede desprender pedacitos y terminarás tomándotelos. 

En el caso del AeroPress, es un método tan nuevo (se inventó apenas en 2005) que sólo la marca original tiene la patente, así que adquiere el más barato, pero fíjate que tenga la ® de marca registrada para asegurarte de que no es una imitación. Aunque hay un sinfín de métodos más como Chemex, sifón japonés, dripper, moka pot…, vale la pena que te enfoques en estos dos por su precio y su sencillo modo de uso.

Prensa francesa

La ratio recomendable para preparar café con prensa es de 1:15, es decir, si tu prensa francesa es la versión individual de 350 mililitros, deberás utilizar entre 20 y 23 gramos de café, que equivalen aproximadamente a una cucharada sopera. Este método utiliza molienda gruesa. Ya que hayas echado el café, llénala con agua caliente (procura apagar la llama poco antes de que hierva). Tápala sin bajar el émbolo. Espera cuatro minutos y bájalo lentamente. Deja reposar la mezcla por un minuto y sirve. El resultado de este método es un café con mucho cuerpo, denso y, si el café está recién molido, también podrás disfrutarlo con su crema natural.

Aeropress

Su inventor, Alan Adler, ideó este método con la idea de acortar el tiempo de infusión del café y así reducir su sabor amargo, es decir, es el más rápido de todos, ideal para los impuntuales que siempre salen corriendo de casa. Para utilizarlo, hay que colocar el filtro (los de la marca original son desechables de un solo uso, sin embargo, hay una versión de acero inoxidable reutilizable), 20 gramos de café con una molienda media-fina, después agregar agua caliente y esperar de 40 a 60 segundos. ¡Listo! Sólo tienes que vaciarlo sobre tu taza como si fuera una jeringa. El resultado es una taza con sabor muy intenso, de una acidez baja y mucho cuerpo. 

El café

Nada causa más ansiedad que pasar por el pasillo de café en el supermercado. Las opciones son demasiadas y es difícil elegir. Natalia Musacchio recomienda: “Siempre, siempre, siempre, compra café en grano para molerlo en casa. El café pierde propiedades al instante en que se muele, imagínate el empacado que lleva quién sabe cuántos meses en el anaquel. Hoy en día, hay molinos eléctricos muy accesibles, una súper opción es el Hamilton Beach. Si ahorita no puedes destinar un presupuesto para un molino, entonces cómpralo a granel y que te lo muelan en la tienda. Compra cantidades pequeñas para que no se quede molido tantos días y puedas disfrutar de un café que al hacerlo tenga crema propia (mi favorito)”.

¿Y de los cafés en grano cómo saber cuál elegir? Aquí la clave es fijarte que la forma, el color y el tamaño de los granos sean lo más uniforme posible. El color te dice que el tostador los tostó parejo y no quemó más a unos, la forma te indica que el cafetal no fue afectado por un bicho que se comió parte de los granos y el tamaño sí importa, pues si al tostarlos los granos son muy distintos en tamaño, el calor hará que unos se tuesten más y el resultado puede no ser el esperado. El precio no suele ser un indicador, pues, así como el vino, puede ser que cierto café sea más caro que otro por el simple hecho de que su producción sea menor, no necesariamente por su calidad. 

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Biografía

Natalia Musacchio es una apasionada del café. En 2015 abrió Café con Ruedas, una barra móvil de café que promete cautivar a quienes lo prueben.

Encuéntrala en:

Sitio web: www.cafeconruedas.mx

Facebook: @cafeconruedasmx

Instagram: @cafeconruedas

Correo: [email protected] 


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